Musica Calleshortbus
viernes, 30 de diciembre de 2011
EL LUGAR AQUEL
jueves, 17 de febrero de 2011
CALLESHORTBUS PRESENTE EN EL LANZAMIENTO DEL MANUAL PARA EL RECONOCIMIENTO Y RESPETO DE DERECHOS DE LA DIVERSIDAD SEXUAL Y LAS IDENTIDADES DE GÉNERO
La presentación estuvo a cargo de la Directora de la Escuela de Gobierno y Liderazgo (Olga Acosta), en panel con el director de la Corporación Caribe Afirmativo y la psicóloga y también miembro de dicha corporación, Claudia Ayola.
En la ponencia de presentación, Acosta habló del compromiso visceral de la administración pública con el tema del reconocimiento de los derechos de las personas sexualmente diversas “la diversidad sexual está en las entrañas de la administración pública, por esa razón surge esta alianza maravillosa con Caribe Afirmativo” expresó segundos después de empezar su presentación.
El paso siguiente fue para la Psicologa y reconocida columista del periódico local El Universal. Ayola, a manera de exposición y de una manera muy light mantuvo atentos a los asistentes, mientras entre chistes y anécdotas hablaba de las generalidades y particularidades que afectan a todas las personas cuya sexualidad se aparta de los lineamientos heteronormativos impuestos por la sociedad.
Se hizo un reconocimiento simbólico a las víctimas de odio impulsados por homofobia, y por supuesto se trajo a la recordación pública el reconocido (y aún impune) caso de Rolando Pérez, asesinado en su vivienda años atrás.
Varios colectivos a favor del reconocimiento de los derechos humanos y de la población LGBTI estuvieron en dicho lanzamiento y por supuesto Calleshortbus no podia faltar.
Christian Howard Hooker
Colectivo Calleshortbus
Por una Heroica Abierta a las Disidencias
miércoles, 26 de enero de 2011
UN TRAGO AMARGO
(A propósito de botellas en el culo)
Mi intimidad es mia, la tuya… también
C. H. H
Somos un país altamente morboso y por más que intentemos negarlo, es imposible lograr la negación de lo evidente; y aunque parezca redundante mi anterior alusión, la resolución de ésta hablará por sí misma… no desesperen.
En ocasiones lo evidente se nos oscurece de tal manera que parece imposible acceder a ello; pero en realidad, siempre ha estado allí, y por lo regular, en su lugar permanece por largo tiempo, a veces, por siempre.
Hace poco, tod@s tuvimos acceso (de manera extremadamente detallada y comedida) a la primera noticia sensacionalista del año. Fue humillante para muchos, incluyendo a este humilde servidor, haber tenido acceso a tan ridícula manifestación de inconsciencia e irrespeto a la integridad e intimidad de un miembro de esta ciudad. Y ni siquiera daré uso al recurso de apoyar mi argumento al hecho de que se tratara de un sujeto de avanzada edad, pues, los años, el género o las canas que se tengan en la cabeza, no deben ser excepciones para permitir o restringir el acceso a un periodista a una noticia determinada.
La intimidad es íntima y pertenece (o debería pertenecer) solo a quien necesita mantenerlo en ese estado. La intimidad (hablando de la intimidad determinable espacialmente) le pertenece a las cuatro paredes de un cuarto, llámese: habitación, sala, comedor, baño e incluso una instalación hospitalaria; y cualquier filtración o acceso mal o bien intencionado a estos espacios, se denomina violación al principio fundamental de la intimidad.
El hecho de publicitar el accidente de aquel sujeto, que a fin de cuentas pudo haberse metido (si quisiera) una retroexcavadora por el culo, fue el gesto más evidente que, tanto “periodistas” como gente del común; pasando obviamente por médicos, enfermeras, personal administrativo, aseadores, pacientes e incluso personal ajeno a la institución, (los cuales, directa o indirectamente pudieron ser los artífices de esta tragedia comunicacional y civil), somos tan básicos e inmaduros, que el mundo se nos viene encima y nos paralizamos imaginando los gases que absorbieron la botella de costeñita que se metió (o le metieron… como aún lo investigan) el sujeto aquel por el recto.
La intimidad es íntima, pero al parecer solo nos interesa mantener la nuestra en ese estado; la del otro es otra cosa.
Somos altamente morbosos, pero también siniestros, estúpidos, simples y no le envidiamos nada a los Británicos y sus periódicos amarillistas. Pero la muestra más fehaciente de nuestra imbecilidad es que haya logrado incluso, que yo sacrificara mi sueño escribiendo esto.
GRACIAS
Posdata: y a los responsables, que los investiguen judicialicen y castiguen; y ojalá ridiculicen.
Si necesitan ayuda, cuenten con este humilde servidor.
Christian Howard Hooker
Colectivo Calleshortbus
Por una Heroica Abierta a las Disidencias